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Marta, ¿tú qué opinas del anuncio de Apple?

Actualidad gramer

Por Marta González-Moro, CEO de 21gramos, impulsora de Marcas con Valores y editora de Igluu

La pieza de comunicación sobre los avances en el Plan 2030 de Apple ha generado debate en los mentideros de la sostenibilidad. ¿Un greenwashing muy bien hecho o una manera revolucionaria de contar bien el desempeño de la compañía?

Hace escasamente un mes, vio la luz una pieza de comunicación –una magnífica producción audiovisual– que ha tenido bastante repercusión en los mentideros de la sostenibilidad. Si todavía no lo has visto, te lo dejo aquí debajo. Hazlo antes de seguir leyendo. O mejor, no lo veas y hazlo después si te han entrado ganas. 

Para ser honesta, me ha sorprendido la cantidad de vosotros –de lectores, seguidores y clientes de 21gramos, Marcas con Valores o Igluu– que personalmente me habéis preguntado: «Oye, Marta, ¿y a ti qué te parece…?». Puedo decir, como si fuera una influencer de Instagram, eso de que me estáis preguntando mucho. Además, he notado que lo hacíais con curiosidad real, con verdadero interés.

La cuestión me resuena, más que por lo que realmente piense yo del vídeo, por el hecho en sí de que mis clientes o colegas de profesión quieran saber mi opinión. Esto último me ha hecho reflexionar si realmente me hacen la pregunta a mí –deduzco que suponen que tengo criterio suficiente como para dar un veredicto: no sé si esperan de mí un juicio moral o una opinión de índole creativa, pero agradezco el halago– o se la hacían a ellos mismos. Porque creo que, llegados a este punto, todos quienes estamos involucrados en esta conversación sabemos contestar a la pregunta, aunque lo hagamos con distintos criterios. 

¿Me preguntaban o se preguntaban indirectamente si hacer una pieza de comunicación sobre la sostenibilidad de una compañía marca o producto de manera bella, currada, magníficamente guionizada, producida con esmero (y con mucha pasta) es greenwashing? O, enfocado de otra manera, ¿quizá su duda era cómo elegir los datos y métricas honestas para transmitir credibilidad y trazabilidad de desempeño sostenible sin generar desconfianza?

Pero, fuera lo que fuere lo que querían saber, aquí va lo que pienso: me flipa que Tim Cook coprotagonice el vídeo. Y entonces me imagino a quienes dirigen las compañías de los que me habéis preguntado. Os invito a la reflexión inversa: ¿cómo sería la pieza si apareciera vuestro jefe? 

También me viene a la cabeza rápidamente el perverso pensamiento económico. Pienso en el presupuesto del que disponéis para las piezas de comunicación vinculadas a los informes o memorias anuales, el reporting de impacto o de temas específicos de sostenibilidad. Os imagino dándole al play y preguntándoos con cierta frustración si con vuestro presupuesto podríais hacer una pieza tan wow.  También oigo vuestro pensamiento contestando automáticamente en un nanosegundo (en el metaverso): «Claro que no. Qué tontería. Nosotros no somos Apple». 

No, para lo bueno y para lo malo, no somos Apple. Pero eso no significa que no podamos aspirar a hacer la mejor comunicación posible con las herramientas de las que disponemos o pelear con determinación un aumento de recursos. Aunque contar nuestro desempeño de manera clara, coherente e inspiradora, sexy, divertida no depende tanto del presupuesto como de la creatividad y la innovación con la que seamos capaces de hacerlo. 

De los cinco minutos que dura el vídeo, yo me quedo con Tim. Tras su frase de bienvenida a la Madre Naturaleza –espectacular Octavia Spencer–, su siguiente intervención de guion, ya acercándose al final de la pieza, es para decir con perfecto acento californiano: there is a lot of work to do. Una frase que, no es por nada, pero parece la traducción literal de #MuchoPorHacer, el hashtag que acompaña a 21gramos desde long time ago. 

Para dejar atrás los anglicismos e intentar resumir el asunto de manera coloquial, en vez de citar a un clásico filósofo o una pensadora influyente, cierro al estilo de ese bienconocido presidente gallego: «cuanto más haga, mejor para todos y, cuanto mejor lo cuente, más».

Ser B: el círculo virtuoso del activismo corporativo

Actualidad gramer

Por Marta González-Moro, CEO y socia fundadora de 21gramos

En 2019 celebramos con orgullo que 21gramos se sumaba a la familia B Corp. Nuestro cumplimiento con los más altos estándares en términos de desempeño social y ambiental, transparencia y responsabilidad empresarial nos convertía en la primera consultora de comunicación en obtener la certificación en España.

Pero lo más motivador nunca fue haber coronado una cima, sino saber que el camino continuaba al otro lado de la montaña. Con fuerzas renovadas y extraordinarios compañeros de viaje.

Convertirnos en B Corp supuso sin duda un punto de inflexión para emprender un proceso de mejora continua que, en escasos cuatro años, nos ha llevado a incrementar nuestras métricas de impacto en un 50%, una inyección de energía para seguir persiguiendo el propósito de construir una sociedad mejor para todxs. Más justa, más humana y más sostenible.

La evaluación de impacto de 2022 muestra que estamos por encima de la media de la puntación global de las B Corp, y por encima también en cada una de las dimensiones analizadas con respecto a nuestro país o compañías del mismo sector o tamaño, despuntando especialmente en gobernanza y medio ambiente. Un círculo virtuoso que nos hace cada día mejores, y que nos ha validado como B Way Partners para guiar a otros en este proceso de certificación o acompañarlos en la búsqueda de la excelencia del desempeño en sostenibilidad. En ese papel de sherpas que una vez nos atribuyó uno de nuestros clientes, nos reconocemos.

«No ha sido fácil, aunque nos hemos dejado la piel», que diría Revolver en esa canción cuyo título, 21gramos, parece un ejercicio de antropología convergente. Pero esta evaluación tan exigente pone números a lo que somos y hacemos desde hace ya más de 15 años: el 100% de nuestros proyectos impacta positivamente en el entorno en, al menos, una de las cinco áreas B Corp. Igualmente cabe señalar que nuestras ambiciosas medidas de reducción y compensación de emisiones implementadas tanto en nuestra oficina como en nuestros desplazamientos y eventos nos han permitido ampliar nuestros objetivos de descarbonización, acortando además el horizonte temporal y pasando de Net Zero en 2030 a Net Positive en 2022.

Pero si algo diferencia a 21gramos es su talento comprometido. «Personas primero» no es solo una declaración de intenciones, sino una realidad desplegada en un marco de actuación trazable. Como socia fundadora de esta compañía puedo asegurar que, si algo me ha enseñado el camino recorrido todos estos años, es que cuando las mejores personas para el mundo te acompañan en la ardua travesía de hacer un negocio al mismo tiempo rentable y responsable, el viaje se convierte en una fuente infinita de recompensas tras el descarte constante de atajos cortoplacistas. Lealtad al propósito y compromiso al desempeño definen nuestra cultura compartida en un equipo diverso, plural y sí, por qué no decirlo, activista.

Es entonces cuando se produce la paradoja de la incredulidad: aquellos que, desde la barrera, cuestionan e incluso subestiman la capacidad de las organizaciones no ya para mejorar la realidad que las rodea, sino la suya propia. La falta de ética, de voluntad o de liderazgo suele alimentar esta querencia a juzgar al otro, sin caer en la cuenta de que el veredicto final suele estar en manos de aquellos que te acompañan en el día a día. De tu gente.

Formar parte de la comunidad B Corp es liderar con el ejemplo: hacer antes que decir. Es asumir como propio el activismo corporativo, es creer firmemente que se puede hacer empresa y mejorar esta sociedad sin encasillarse en ideologías y huyendo de prejuicios excluyentes. Porque nadie, ni personas, ni empresas ni gobiernos, somos 100% sostenibles. El valor reside precisamente ahí, en la profunda sencillez de que todo, siempre, se puede hacer mejor.

Laura Zamarriego

Laura Zamarriego se reincorpora a la dirección editorial de 21gramos

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Tras dos años en el Gabinete de Comunicación del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, la periodista vuelve a la consultora de la que formó parte hasta 2020.

21gramos, primera agencia especializada en sostenibilidad en certificarse como B Corp en España, refuerza así el equipo de comunicación y nuevas narrativas, uno de sus pilares estratégicos.

Madrid, enero 2023. La consultora de comunicación especializada en sostenibilidad 21gramos ha anunciado el fichaje de Laura Zamarriego en su área de contenidos estratégicos. La periodista, con sólida trayectoria en el campo de la sostenibilidad y ponente en congresos y conferencias como el Congreso Nacional del Medio Ambiente (CONAMA), no es una desconocida para 21gramos: formó parte de la agencia hasta el año 2020 cuando recibió la llamada del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico para incorporarse como asesora en el Gabinete de Comunicación.

Allí ha permanecido desde entonces, asumiendo labores de relación con periodistas y medios de comunicación especializados; redacción de intervenciones, tribunas y argumentarios, coordinación editorial de campañas de publicidad institucional o moderación y organización de eventos.

Hoy la periodista se reincorpora como directora de Narrativas y de Relaciones Institucionales para coordinar la estrategia editorial  de la agencia, desde la consultoría especializada a los proyectos de comunicación e inteligencia social que realizan con sus clientes. Además, también estará involucrada en Igluu magazine –revista pionera del lifestyle consciente lanzada por 21gramos en febrero del año pasado– y en el próximo estudio de Marcas con Valores, investigación de referencia en el ámbito de la consumocracia que ya prepara su quinta edición.

«Estoy muy agradecida tanto a la vicepresidenta Teresa Ribera como a todo el equipo del Ministerio por estos dos intensos años de trabajo, en los que se han alcanzado importantísimos avances en materia energética y ambiental, y de los que me llevo aprendizajes de un valor incalculable. Volver a 21gramos es para mí un gran reto, pero lo encaro con ilusión: sé que vuelvo a casa y que voy a trabajar con un equipo con una enorme calidad profesional y humana», explica Zamarriego.

Por su parte, en la consultora también están muy satisfechos con la reincorporación de la periodista, que abre nuevos horizontes en su estrategia de comunicación editorial y refuerza sus relaciones institucionales. «Además de la satisfacción personal por contar de nuevo con ella, su vuelta es una excelente noticia profesional tanto para 21gramos como para todos nuestros clientes. Tras quince años, seguimos apostando, y más fuerte que nunca, por los contenidos editoriales, transformadores y de calidad que ayuden a conseguir nuestro propósito: construir juntos una sociedad más justa, humana y sostenible», afirma Marta González-Moro, CEO de 21gramos, impulsora de Marcas con Valores y editora de Igluu.

Sobre 21gramos

21gramos, fundada en 2007, es un referente en consultoría de marca y transformación ética empresarial. Desde hace quince años, es una compañía líder en investigación sobre las tendencias y la evolución de las marcas en España, siendo la primera consultoría de comunicación y sostenibilidad en obtener el certificado B Corp.

Además, la agencia es la impulsora de Marcas con Valores®, un movimiento colaborativo cuyo fin es generar espacios de conocimiento compartido y foros de co-inspiración sobre las marcas que conectan y conversan desde los valores. Entre sus proyectos de inteligencia social, destaca su estudio bianual que, desde 2015, se sitúa como un referente en materia de consumocracia.

En 21gramos también editan la revista Igluu, un proyecto editorial pionero en el lifestyle consciente lanzado en 2021 con la firme intención de inspirar a quienes aspiran a disfrutar de un nuevo estilo de vida consciente, saludable, optimista, colaborativo y plural, capaz de redefinir y asentar las nuevas bases del siglo XXI.

Net positive: trascender el ‘zero’

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Para combatir la emergencia climática es necesaria la fuerza de Goliat, pero también la agilidad de David. Las grandes compañías tienen que tomar decisiones que generen ese gran impacto positivo, pero las pequeñas y medianas empresas también deben hacerlo para contribuir al cambio de modelo: esa es la clave para convertirse en Net Positive.

Cuando se escriben estas líneas, acaba de comenzar la segunda gran ola de calor del verano, que dejará temperaturas que rozarán los cincuenta grados en algunas zonas de la península. La primera, que llegó tempranamente en junio, se cobró, según los cálculos del Instituto de Salud Carlos III, la vida de 700 personas y dejó un saldo de miles de hectáreas calcinadas en diferentes incendios de la península, que arrasaron en menos de dos semanas casi lo mismo que en todo el año anterior. En esta, también hemos tenido que lamentar la pérdida de vidas humanas y de decenas de miles de hectáreas en Zamora, Ávila, Ourense o Cáceres. Y solo estamos a mediados de julio.

 

Casi al mismo tiempo, el IPBES –la Plataforma Intergubernamental Científico-Normativa sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas, el organismo de Naciones Unidas que, si hablamos de biodiversidad, sería el equivalente al Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) del que tanto hablamos los que nos dedicamos a la sostenibilidad– publicaba un nuevo y demoledor informe en el que se muestra especialmente crítico con las decisiones económicas y políticas respecto a la naturaleza. El organismo internacional señala a la priorización de los beneficios a corto plazo y el crecimiento económico como principales responsables de que la protección de la biodiversidad y la naturaleza no tenga el peso suficiente en la balanza. Como vías para reequilibrar la situación proponen, entre otras, aquellas relacionadas con la economía verde y la protección de la naturaleza.

Hace ya años que, dentro de las esferas económicas, la sostenibilidad está presente en todas las conversaciones. Desde aquellas cartas del CEO de Blackrock hace ahora una década, pasando por aquel icónico editorial del Financial Times pidiendo el reseteo del capitalismo –y por las numerosas declaraciones del FMI o la Bussiness Roundtable con las mismas reclamaciones– y hasta llegar a los objetivos climáticos del Green New Deal Europeo, es indudable que el dinero hoy es más verde que nunca. Hemos ido avanzando en el camino pero, ¿hemos avanzado lo suficientemente rápido?

El movimiento BCorp, al que pertenecemos con orgullo en 21gramos, fue la avanzadilla en materia de descarbonización. En 2019, en el marco de la COP25 celebrada en Madrid, anunciaron el compromiso de 500 de sus empresas –27 de ellas españolas– para alcanzar las cero emisiones en el año 2030, veinte años antes de ese 2050 que se ponía la UE como horizonte. Sin embargo, desde entonces, el tablero de juego ha cambiado: a las consecuencias de una pandemia que ha evidenciado nuestra interdependencia con los demás y con el planeta se suman las conclusiones del último informe del IPCC, que actualiza los datos que llevaron al Acuerdo de París y que subraya de forma demoledora que los cambios no pueden esperar tanto. Si las consecuencias de la emergencia climática ya son irreversibles, poner la mirada a mediados de siglo las puede convertir en catastróficas. El race to zero que ya han comenzado algunas corporaciones es un buen inicio, pero hoy esa carrera tiene que pasar de maratón a sprint: compensar no es suficiente, sino que hay que reducir y regenerar.

Del Net Zero al Net Positive

 

Paul Polman, ex CEO de Unilever, fue uno de los primeros en hablar del concepto net positive para referirse a aquellas empresas que buscaban que el mundo prosperase. En el libro Net Positive: How Courageous Companies Thrive by Giving More Than They Take –aún sin traducción al castellano–, escrito junto a Andrew Winston, aborda esta nueva concepción corporativa que pone el bienestar en el centro, conocen y asumen sus impactos y buscan mejorar la realidad de sus compañías y el entorno en el que operan a largo plazo.

«Viendo cómo se han acelerado las crisis que enfrentamos, necesitamos un movimiento para cambiar la forma de hacer negocios. El mundo está exigiendo que el sector privado dé un paso al frente: las expectativas sobre el papel de las empresas en la sociedad han cambiado más en los últimos dos años que en los veinte anteriores. Cada vez está más claro que reducir los daños o hacer un cambio gradual no es suficiente. La única forma de mantenerse relevante hoy es convertirse en net positive, que va más allá de hacer menos daño para tener un impacto positivo en todos los aspectos que la empresa toca a través de sus productos, servicios e influencia», explicaba en una entrevista realizada para la edición estadounidense de Forbes.

Aunque ese saldo neto positivo depende de muchas más cuestiones, en él la huella de carbono tiene un peso importante, y cada vez más compañías lo saben y toman decisiones acordes a ello. «Hoy más del 20% de las empresas más grandes del mundo tienen un objetivo de carbono basado en la ciencia, cuando hace cinco años apenas eran solo un puñado. No es suficiente, pero el listón está subiendo rápidamente», subraya Polman, que apunta a los marcos regulatorios y la inversión sostenible como gran catalizador de la aceleración vivida.

Para combatir la emergencia climática es necesaria la fuerza de Goliat, pero también la agilidad de David. Las grandes compañías tienen que tomar decisiones que generen ese gran impacto positivo, pero las pequeñas y medianas empresas también deben hacerlo para contribuir al cambio de modelo. Nosotros, en 21gramos, podemos decir con orgullo que tenemos el sello Carbon Negative: en 2021, hemos compensado el doble de nuestras emisiones.

¿Cómo? En primer lugar, calculando nuestra huella de carbono. En nuestra oficina todo funciona con energía 100% renovable de otra compañera BCorp como Holaluz, y apostamos por Cabify para nuestro transporte, ya que compensan su huella. Precisamente en materia de transporte es donde más cambios hemos implementado en los últimos años: si la pandemia generalizó el teletrabajo, a nosotros nos reafirmó en lo importante que es para nosotros la flexibilidad. Tenemos a parte de la plantilla que trabaja de forma permanente fuera de Madrid –en Alicante, en Zamora o en Málaga–, pero eso no quiere decir que no nos veamos las caras todos los días, sino que optimizamos al máximo las reuniones físicas, cuadrando agendas y perfiles para evitar desplazamientos innecesarios, y por supuesto calculando las emisiones de nuestros trayectos en función del medio de transporte, incluido el único coche de gasolina que tenemos, nuestra principal fuente de emisiones en este aspecto. Este año no cogimos ningún avión, pero sí autobuses, trenes y metro para ir a la oficina, a la que la mayoría de nosotros llegamos en transporte público, y hemos pesado nuestros residuos y controlado nuestro consumo de agua, entre otras cosas. Gracias a eso sabemos que los cafés que allí tomamos supusieron un total de 204,3 kilogramos de CO2 –entre las cápsulas biodegradables y la leche– o que los taxis que cogimos en todo el año alcanzaron los 88 kilogramos, por ejemplo.

En total, en 2021 emitimos a la atmósfera 4.209 kilogramos de CO2, el equivalente a 44 trayectos en coche entre Madrid y Barcelona. Mientras trabajamos por reducirlas, tomamos la decisión de que no bastaba con ser net zero ocho años antes de lo que habíamos firmado como B Corp. Porque, si hablamos de compromiso y ser la vanguardia del cambio, ¿cómo no vamos a predicar con el ejemplo en nuestra propia casa? Sabemos que, siendo una agencia y consultora B2B lo tenemos más fácil que otras industrias, pero aún siendo conscientes de ello, tenemos el compromiso firme de hacer todo lo que esté en nuestras manos para reducir, regenerar y evolucionar cada día más en el camino del Net Positive.

La MODA cantan aquello de que es imposible ser neutral sobre un tren en movimiento. Cuando hablamos de emisiones, el convoy más veloz que atraviesa este milenio, ese mensaje también se cumple. Afrontar los retos a los que nos enfrentamos como sociedad y como compañías necesita que asumamos nuestras imperfecciones y desterremos los prejuicios moralistas que puedan existir sobre la sostenibilidad. También requiere de grandes dosis de alianzas y de liderazgo en positivo, de tomar decisiones que hagan posible un cambio que no será fácil, pero que es necesario. La recompensa vale la pena.

15 Años 21gramos

Una Blackberry, Greta y los cisnes negros. Cumplimos 15 años

15 años 21gramos

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Marta González-Moro. Socia fundadora de 21gramos

A principios de 2007, Steve Jobs presentaba su primer iPhone, yo maldormía con mi BlackBerry echando humo y un biberón en la mesilla, tenía un bebé de cinco meses y esperaba ya a mi segundo hijo. Incansable el trabajo e infinito el empeño para emprender en un proyecto en el que el equipo fundador creíamos que, por fin, conjugamos nuestra experiencia profesional acumulada en el mundo de las telecos, la consultoría y la comunicación con nuestra inquietud personal por querer hacer las cosas de otro modo.

Así nace 21gramos, el año en que Al Gore y el IPCC ganaban el premio nobel de la paz al alimón, y recuerdo que lo celebramos, pero no escribimos nada en redes porque no teníamos redes. WhatsApp e Instagram ni siquiera existían.

Corría el 2007, es decir, un contexto económico de excesos, sin límites, donde pensar en una cercana y profunda crisis era tan distópico como prever un rescate bancario, un colapso social, el fin del bipartidismo, o precisamente eso: era imposible visualizar que las BlackBerries fueran a desaparecer de nuestras vidas de un día para otro.

El primer proyecto que firmamos fue para Adecco, algo que siempre le recuerdo y agradezco a Paco Mesonero cada vez que le veo. Conjugaba el incentivo comercial con objetivos y métricas de desempeño social y medioambiental, sin duda algo muy innovador para aquellos tiempos. Y así, tras dos años espectaculares, llegó lo inimaginable.

La larga travesía por el desierto 2008-2014 sumió a la economía y sociedad española en una década gris; sin embargo 21gramos surfeaba en oasis intelectuales y profesionales donde se profundizaba en el rigor y se anticipaba la Agenda 2030. Con proyectos de presupuestos reducidos aprendimos que la innovación y el propósito eran irrenunciables.

Llegó el 2015 y desde 21gramos lanzamos Marcas con Valores, una plataforma de conocimiento compartido y foro de co-inspiración para seguir innovado y ofrecer conocimiento y anticipación de tendencias, para las marcas que conectan y conversan desde los valores con una ciudadanía cada día más sensibilizada en todos estos temas. Queremos agradecer profundamente a los más de 4000  expertos, académicos, líderes de opinión y profesionales de sostenibilidad, innovación social, comunicación, marca y reputación que a día de hoy nos acompañan y colaboran en la investigación y aplicación de la inteligencia social, así como a las marcas que nos apoyan directamente en la realización del Estudio Marcas con Valores, que tras cuatro ediciones bienales y una especial COVID­-19, se consolida como un referente de análisis social de la consumocracia.

El proyecto de 21gramos puede considerarse nativo sostenible pues, desde nuestro momento fundacional, siempre hemos supeditado nuestro modelo de negocio a nuestro propósito: co-construir una sociedad más justa, humana y sostenible. En el 2019, convertirnos en la primera consultora de sostenibilidad y comunicación en obtener la certificación B Corp en España, nos impulsó a reafirmar, con más fuerza si cabe, nuestro firme e interdependiente compromiso con los más altos estándares sociales, medioambientales y de buena gobernanza.

Con más de 150 proyectos de activación ética de las marcas gestionados, 15.000 seguidores en redes, el Estudio de Marcas con Valores consolidado, y un proyecto editorial de lifestyle consciente recién lanzado, Igluu, el equipo de 21gramos estamos convencidos de que queda #MuchoPorHacer, pero de igual modo sabemos que sin todas las personas que nos acompañáis en este camino sin fin, pero con rumbo bien definido, no hubiera sido posible, y queremos daros la gracias por ello.

Hoy en el año 2022, superada la crisis económica, y podríamos decir que también la pandemia, mis hijos ya adolescentes siguen a Greta, y en el equipo de 21gramos nos involucramos en un proyecto de exploración del metaverso consciente a la vez que nuevos cisnes negros asoman con fuerza bélica e injusta.

Si algo hemos aprendido durante todo este largo trayecto es que las inclemencias e incertidumbres de toda índole son compañeras inseparables del viaje, que no hay mejor compañía que las personas con la que compartes tu propósito porque con ellas siempre llegas a buen puerto, que la generosidad es la moneda con la que mejor inviertes y que merece la pena siempre empeñarse en co-construir un mejor mundo para todos.

Que tengamos otros 15 años más de travesía compartida. Gracias.


¿Quieres saber cómo podemos ayudarte a activar la gestión ética de tu empresa? Contacta con nuestro equipo y te lo contamos. 

21gramos, empresa certificada B Corp

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21 gramos es el peso del alma. Esa alma representa nuestro compromiso con las personas y con el planeta, el propósito con el que nacimos en 2007 y que nos motiva cada día para seguir mejorando.

Desde 2019 podemos decir con orgullo que 21gramos es una B Corp, porque ha sido certificada por su cumplimiento con los más altos estándares en términos de desempeño social y ambiental, transparencia y responsabilidad empresarial, convirtiéndonos así en la primera consultora de comunicación española B Corp y elegida Best For The World en categoría Workers (Empleados).

Esta certificación nos ha permitido, a su vez, descubrir nuevos procesos de innovación y excelencia empresarial. Siendo nativos sostenibles y con 14 años de andadura, nos sorprende que cada día nuestra ambición de impacto sea mayor.

Sumarse a los desafíos globales desde las propias incertidumbres y contextos locales o individuales eleva nuestra ambición y nos empodera.

Por qué somos B Corp: algunos datos de impacto


  • El 100% de nuestros proyectos impacta positivamente en el entorno en, al menos, una de las cinco áreas B Corp: Trabajadores, Comunidad, Medio Ambiente, Gobernanza y Clientes.


  • Nuestra metodología de trabajo parte de una perspectiva colaborativa, involucrando a los clientes en el proceso para co-crear el proyecto con ellos.


  • En el marco de nuestro compromiso Net Zero 2030, implementamos medidas de reducción y compensación de emisiones tanto en nuestra oficina como en nuestros eventos.


  • El promedio de satisfacción de nuestros empleados se sitúa en el rango del 81-90%.


  • Contamos con nuestro manual del empleado y con el «Decálogo del bienestar gramer», que reflejan nuestro compromiso por la igualdad de oportunidades, la transparencia, la escucha activa y la colaboración.


  • Apoyamos la conciliación de la vida personal y familiar. Facilitamos el acceso a la formación y desarrollo personal y profesional. Castigamos el acoso y el abuso. Motivamos el voluntariado y el servicio a la sociedad.


  • El 100% de la propiedad de la compañía pertenece a mujeres.


  • Somos talento comprometido: el 100% de nuestros empleados está comprometido con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas.


  • A través de nuestros estudios de Marcas con Valores, contribuimos a la sensibilización sobre consumo consciente y al ODS 12.


  • A través del área de Más Allá de la Z, contribuimos a la sensibilización y divulgación de valores éticos y sostenibles en el ámbito educativo.


  • A través de Aula21, formamos a los profesionales para liderar la transformación que requieren los actuales desafíos medioambientales y sociales.


  • Constantemente incorporamos el impacto social y medioambiental en la toma de decisiones, ya que lo consideramos importante para el éxito y rentabilidad de nuestro negocio. El Consejo Directivo revisa trimestral y anualmente estos hitos.


Las organizaciones tenemos el deber, y la oportunidad, de ejercer nuestro «rol político», entendiendo la Política, con mayúsculas, como ese arte virtuoso de organizar el entorno en el que nos ha tocado vivir. Aquella que no se encasilla en ideologías, sino que se centra en el bienestar de las personas. Aquella que en ningún caso es territorio exclusivo de los políticos, sino que se ejerce desde todas las esferas públicas o privadas. Y es así como desde 21gramos entendemos el Activismo Corporativo.

Las Empresas B estamos demostrando, con hechos, el poder transformador de las organizaciones para rediseñar los indicadores de progreso y co-construir una sociedad más justa, humana y sostenible. No queremos ser las mejores empresas DEL mundo, sino las mejores empresas PARA el mundo.

Sobre la Comunidad B Corp

Presente en 70 países y 150 sectores distintos, el movimiento empresarial B Corp impulsa un modelo empresarial orientado hacia la creación de valor para el conjunto de la sociedad y el triple impacto –ambiental, social y económico–.

El propósito de la empresa no puede continuar siendo únicamente el de generar valor para el accionista, una idea defendida incluso desde el Foro de Davos o la Business Roundtable. Urge reinventar el capitalismo. Las casi 4.000 compañías B Corp llevan este ideal a la práctica.

B Corp es mucho más que una etiqueta. Es una comunidad activa –y activista– de personas que tienen la convicción de que hay otra manera de hacer negocios, transformando modelos de creación de valor cuantitativo hacia la creación de valor compartido, poniendo en el centro de la estrategia el bienestar de las personas y el planeta.

B Corp es un espacio colectivo que permite a las organizaciones sumar esfuerzos para contribuir decididamente al desarrollo sostenible y a la Agenda 2030. Proyectar el futuro que deseamos… y alcanzarlo.

La activación de modelos de gestión ética no es una moda, sino un modo de comprender y de hacer empresa. Hoy, más que nunca, es tiempo de actuar.

Formar parte de la comunidad B Corp produce un claro orgullo de pertenencia, pero también supone una ambición renovada hacia un activismo corporativo que te compromete todavía más, si cabe. «Personas primero» no es solo una declaración de intenciones, sino un compromiso desplegado en un marco de actuación trazable. Marta González-Moro, CEO de 21gramos e impulsora de Marcas con Valores
El equipo de 21gramos representa la esencia de la comunidad B Corp: personas que se esfuerzan y se comprometen cada día por mejorar su impacto social e inspiran con sus acciones a otras compañías para formar parte de la comunidad de las mejores empresas para el mundo. Pablo Sánchez, director ejecutivo de B Lab Spain
Nueva Web

Nueva web, mismo propósito

nueva web

Actualidad gramer

21 gramos es el peso del alma. Esa alma representa nuestro compromiso con las personas y con el planeta, el propósito con el que nacimos en 2007 y que nos motiva cada día para seguir mejorando.

Mejorando por dentro… y por fuera. Porque, como siempre decimos, el fondo y la forma, el contenido y el continente, el qué y el cómo, son binomios inseparables en el terreno de la comunicación (y en la vida).

Bajo esa convicción, nos hemos parado a reflexionar y a reescribir nuestro propio relato para poder compartir, con mucho orgullo, la propuesta de valor de 21gramos a través de la renovada página web.

Más clara, accesible y visual

Con el objetivo de darle más y mejor visibilidad a nuestros productos y proyectos, la nueva web cuenta con un diseño mucho más limpio, optimizado y adaptado a todos los dispositivos móviles.

Un espacio para la conversación

Ortega y Gasset defendía que toda verdad es una verdad en perspectiva. Inspirados en esa idea, hemos creado un nuevo blog, un espacio de encuentro, de escucha, de conversación… y de perspectivas.

Desde el orgullo B corp

El activismo corporativo corre por nuestras venas. Como primera consultora de comunicación española en obtener la certificación B Corp y miembros de la gran Comunidad B, no podría ser de otra manera. Hemos querido trasladar ese orgullo de pertenencia a la nueva web, de la misma manera que lo trasladamos a todo lo que hacemos.

La transversalidad de la metodología SMART

Todos nuestros proyectos emanan de la inteligencia colectiva. Algo que puede aplicarse tanto al trabajo con nuestros clientes como a nuestra realidad de nuestro día a día dentro de la organización. A este modus operandi lo llamamos metodología SMART.

Somos talento comprometido

Todo esto no habría sido posible sin el compromiso gramer, un equipo diverso, transversal, multidisciplinar y colaborativo, pero, sobre todo, un grupo de personas que comparten la certeza de que otra manera de hacer las cosas es posible para co-construir una sociedad más justa, humana y sostenible.

Nos encantará seguir compartiendo este viaje contigo.

Teletrabajo

Decálogo del bienestar gramer: el teletrabajo en tiempos de COVID

teletrabajo

Actualidad gramer

El teletrabajo aún era un territorio inexplorado para muchas organizaciones cuando se decretó el estado de alarma por el COVID–19. A pesar de que el 30,6% de los españoles podría trabajar desde su casa, según un reciente informe del Banco de España, la realidad nos dice que solo el 8% practica su jornada laboral de forma telemática (ocasionalmente o más de la mitad de los días), muy por debajo de la media europea, que se sitúa en el 13,5%. Queda mucho por recorrer, si bien esta crisis sobrevenida ha obligado a transitar el primer tramo del camino en modo esprint.

Como nativos digitales, en 21gramos el teletrabajo siempre ha sido una opción más y se ha ejercido con total naturalidad. Claro que, una vez apagábamos el ordenador en esa «vieja normalidad», nos íbamos al gimnasio, a tomar unas cañas, al cine, al parque con los niños o a ver a nuestros padres o abuelos. Tampoco nuestras casas eran a la vez colegios ni centros de ocio, al menos no a tiempo completo.

Hasta a los equipos con menos cultura presencialista nos ha tocado reaprender, con lo que eso supone en términos de oportunidad y mejora. Entre otras cosas, hemos creado nuestro Decálogo del bienestar gramer, que queremos compartir con todo aquel que haya llegado hasta estas líneas por si le sirve de inspiración o de referencia, ya sea a nivel individual u organizativo.

Gandhi decía que «la felicidad es cuando lo que piensas, dices y haces están en armonía», una idea que conecta directamente con nuestra cultura corporativa. Con este Decálogo, queremos promover e inspirar un ambiente y entorno de trabajo lo más feliz posible, pero el bienestar común dependerá de la coherencia y consistencia del pensar, decir y hacer de cada uno de nosotros.

Disponibilidad: de 9:30 a 18:00 h.

Si necesitamos algo de un compañero y queremos contactarle por teléfono, es importante hacerlo entre las 9:30 y las 18:00 de lunes a jueves y de 9:30 a 14:30 los viernes. Fuera de este horario, debemos tener un motivo muy importante para hacer esa llamada.

Flexibilidad: configura tu jornada

Aunque la disponibilidad sea de 9:30 a 18:00, tenemos la opción de flexibilizar nuestra jornada siempre y cuando se atienda a los clientes y se cumplan las entregas.

Desconexión digital: el móvil, solo cuando toca

Intentemos no escribir en chats grupales fuera del horario general. Esto significa a partir de las 18:00 y, sobre todo, los fines de semana. Es preferible tener los chats en silencio y evitar en la medida de lo posible el «ruido digital».

Reuniones: espacio para la co-creación y la eficiencia

– Cuando haya reuniones con clientes, más de tres gramers son multitud. Aprovechemos el tiempo de los demás y mantengamos la buena costumbre, también trabajando en remoto, de hacer minutas de las reuniones para que los que no asistan puedan enterarse de todo.

– Es importante compartir en la convocatoria la agenda de la reunión y su objetivo.

– A la hora de establecer las reuniones y al comprobar la agenda de los compañeros que van a asistir, debemos evitar ponerlas seguidas. 5 minutos de descanso después de una reunión son necesarios.

Días sin reuniones: busca tu momento para trabajar

Es necesario bloquear un día o, al menos, media jornada, en la que no tengamos reuniones. Un tiempo que nos permita una mayor concentración y deje espacio para la inspiración. Nosotros hemos elegido el ecuador de la semana: los miércoles por la tarde.

Encuentros gramer: la información es empoderamiento

Es importante fomentar reuniones periódicas para conocer el status general de equipos y clientes, así como reuniones creativas e inspiradoras trasversales.

Si necesitas impulsar o poner en valor la comunicación interna en tu empresa, si tienes dudas o si quieres que el equipo especializado de 21gramos atienda tu caso personalmente, escríbenos a hola@21gramos.net.

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